Durante la fase aguda, caracterizada por fiebre y viremia, especialistas desaconsejaron el uso de esos fármacos hasta descartar dengue, pues este virus puede provocar hemorragias y los AINES incrementan esa posibilidad.  

En ese período se recomendó paracetamol para controlar fiebre y dolor, acompañado de hidratación y reposo, bajo vigilancia médica.  

Tras la desaparición de la fiebre, los pacientes suelen presentar dolor articular y fatiga, en esa fase postaguda los AINES pueden aliviar la inflamación persistente, siempre por lapsos cortos y bajo supervisión profesional.  

En casos de artritis crónica posterior al chikungunya, los AINES ofrecen alivio parcial, pero no sustituyen tratamientos de fondo como metotrexato o hidroxicloroquina, que requieren evaluación reumatológica.  

Señales como dolor articular prolongado, rigidez matinal, inflamación visible o molestias gástricas al usar AINES deben motivar consulta médica inmediata.  

La evidencia científica citada por el centro incluye guías de la Organización Mundial de la Salud y estudios regionales que confirman la necesidad de ajustar el tratamiento según la fase de la enfermedad.  

Especialistas insistieron en que la automedicación puede complicar el cuadro clínico y subrayaron la importancia de acudir a profesionales para recibir orientación adecuada. Adelante - Recomiendan uso prudente de ibuprofeno, diclofenaco y naproxeno en chikungunya 

Tiene la expresión de una flor
La voz de un pájaro
Y el alma como luna llena
De un mes de abril
Tienen sus palabras calor
Y frío de invierno
Su piel es dura como el árbol
Que azota el viento
Y tiene el corazón de poeta
De niño grande, de hombre niño
Capaz de amar con delirio
Capaz de hundirse en la tristeza
Pues tiene el corazón de poeta
De vagabundo, de mendigo
Y así lo he conocido
Y así me gusta a mí que sea
Que tenga el corazón de poeta