La Dra. Rubio destacó que el cáncer pediátrico no solo se trata en la sala de oncología, sino que abarca diversos escenarios que forman parte del tratamiento integral de los pacientes.
En el hospital se puedo observar a niños y adolescentes que han superado su tratamiento y se encuentran libres de la enfermedad, así como a otros que aún están en proceso de recuperación.
Este panorama refleja la complejidad y la diversidad de experiencias que viven los pacientes y sus familias.
“La vida va más allá de enfrentar la enfermedad”, expresó la especialista, quien resaltó la importancia de compartir, relacionarse y participar en actividades que van desde lo recreativo hasta la concientización.
Estas iniciativas, impulsadas por proyectos como ALMAS, del cual la Dra. Rubio forma parte, buscan brindar apoyo emocional y fortalecer el espíritu de positivismo tanto en los niños como en sus madres, quienes enfrentan momentos de gran dificultad y miedo durante los largos periodos de tratamiento.
El cáncer pediátrico es la primera causa de muerte en la infancia en la mayoría de los grupos de edad, aunque en Cuba, durante la adolescencia, los accidentes superan ligeramente esta cifra. Sin embargo, sigue siendo un problema de salud significativo.
En el 2024, el Hospital Infantil Sur recibió 28 casos nuevos de cáncer y registró 17 fallecidos, cifras que incluyen a pacientes de las provincias de Granma, Santiago de Cuba y Guantánamo, atendidos bajo una estrategia regionalizada.
La leucemia es la neoplasia maligna más frecuente en la infancia, seguida por los tumores cerebrales, patologías que representan un desafío constante para el equipo médico del hospital.