HOLGUÍN, CUBA.—La enfermedad de Parkinson ya no atormenta a Mariano Alcides Escobar Garrido. Se lo debe al grupo médico multidisciplinario que reanudó en el hospital clínico-quirúrgico Lucía Íñiguez Landín el tratamiento quirúrgico del terrible mal. «Soy otra persona desde que salí del salón de operaciones. Mi cuerpo no está rígido, ni tengo movimientos involuntarios», reconoce con profundo agradecimiento a los especialistas que lo atendieron.
Desde noviembre del 2016, cuando fue retomado este tipo de cirugía de mínimo acceso, otras 17 personas también fueron liberadas del padecimiento. Les realizaron la subtalamotomía, procedimiento que en América Latina solo ejecutan instituciones asistenciales de Cuba, Brasil y México.
Y aquí va una acotación imposible de ignorar: en esas dos últimas naciones cada enfermo debe pagar unos 150 000 dólares, pero en nuestro país, aunque cada operación cuesta aproximadamente 50 000, sigue siendo gratuita.
DIANA A DIANA
La subtalamotomía es una de las dianas o etapas de la cirugía estereotáctica, refiere el neurocirujano Julio César Selva Infante, quien dirige el grupo médico holguinero que hace milagros, al decir de las personas tratadas.
«Hay que navegar con extremo cuidado a través del cerebro del paciente, pero los medios empleados nos aseguran llegar con precisión al núcleo sobre el que trabajamos. Tenemos un marco estereotáctico, equipo clave para localizar el núcleo; dos softwares de producción nacional, uno de planeamiento quirúrgico y otro de registro profundo; así como las computadoras adecuadas para seguir cada paso.
«Son esenciales los electrodos de registro, fabricados en Japón, y los termo-lesionadores que actúan sobre el punto excitado del cerebro que provoca la rigidez, los temblores y los movimientos involuntarios. Es decir, lesionamos ese punto para que desaparezcan las manifestaciones del Parkinson».
Lo logrado, reconoce el galeno, es fruto de la interacción constante con el personal científico del Centro Internacional de Restauración Neurológica (Ciren) con sede en La Habana, el cual hizo la transferencia de tecnología y suministró la mayoría de los medios.
El grupo médico holguinero, compuesto por especialistas en neurología, física, sicología e informática, entre otros, estuvo allí durante el pasado año para entrenarse a lo largo de un mes, ocasión en la que participó en 12 cirugías.
El Ciren, agrega el especialista, siempre los ha apadrinado. «Gracias a sus enseñanzas, entre el 2009 y el 2014 desarrollamos la palidotomía, una diana previa al proceder que hoy aplicamos. Con ella restablecimos 27 pacientes.
Permite eliminar la rigidez y los movimientos involuntarios repetidos de las manos y los pies, aunque no suprime los temblores».
Antes de llegar a esa etapa, otro grupo del Lucía Íñiguez, encabezado igualmente por el doctor Selva y armado de un primer marco estereotáctico, así como de los conocimientos pertinentes, realizó, en sucesivas fases, biopsias de tumores cerebrales malignos, implantaciones de Iridio 192 en tumefacciones del mismo tipo y craneotomías dirigidas a extraerlas.
PREOCUPACIONES, OCUPACIONES Y POSIBILIDADES
En el 2009, al aplicarse la palidotomía, el hospital Lucía Íñiguez pasó a ser la segunda institución médica del país en realizar ese procedimiento. Así asumió pacientes de todas las provincias, una vez que el Ciren cumple además con compromisos internacionales, necesarios para captar divisas que se revierten en el sistema nacional de Salud Pública.
Con el fin de dar vitalidad permanente al tratamiento y aumentar el número de intervenciones tan pronto sea posible, en el plantel existe un sistemático programa de preparación. En ese caso se encuentra el joven doctor Ernesto Horta Tamayo, residente de la especialidad de Neurocirugía.
«Es una cirugía que demanda mucha entrega personal e institucional, pero estoy seguro de adquirir los conocimientos y habilidades necesarios. El entrenamiento transcurre con rigor gracias a la colaboración de los colegas holguineros. Digo lo mismo sobre los integrantes del Ciren. Cuando se reiniciaron las intervenciones nos acompañaron los doctores en Ciencias Juan Tejeiro, Raúl Macías y Mailén Carballo Barreda, quienes no pusieron condición alguna para transmitir su amplia experiencia».
El director del hospital, doctor Luis Manuel García Niebla, expone que el alto número de cirugías en general
(17 000 al año), ha incidido hasta ahora en la programación de una operación de Parkinson por semana. Una vez que el paciente entra al quirófano, dice, permanece allí un largo periodo, porque los médicos ejecutan acciones muy específicas.
(17 000 al año), ha incidido hasta ahora en la programación de una operación de Parkinson por semana. Una vez que el paciente entra al quirófano, dice, permanece allí un largo periodo, porque los médicos ejecutan acciones muy específicas.
«Cuando pongamos en uso el nuevo Cuerpo de Guardia que posee cuatro salones para urgencias quirúrgicas, se liberará espacio en los salones centrales, situación que aprovecharemos para atender mayor cantidad de casos de Parkinson», añade.
Otra posibilidad está identificada en la terminación de tres salones pendientes desde hace años para una segunda etapa constructiva del hospital. Entonces podrían dedicar uno al grupo multidisciplinario que sostiene la intención de adentrarse en la tercera diana quirúrgica del Parkinson, o sea, la vimtalamotomía, que elimina los llamados temblores esenciales.
«De igual manera, nos posibilitaría adentrarnos en el tratamiento quirúrgico de la epilepsia», adiciona Selva.
No omite este competente neurocirujano la aspiración de contar en Holguín con una institución similar al Ciren, idea expuesta por el Comandante en Jefe Fidel Castro durante su visita al hospital en el 2002.
«Me dedicó 27 minutos para conocer la situación en la que estábamos y proporcionar información. Sabía que le interesaba mucho el tema de la restauración neurológica, pero confirmé la importancia real que le otorgaba cuando habló de un centro que se consagrara a ello en la región oriental.
«Su planteamiento generó un inmediato proceso de búsqueda de información y elaboración de planes no realizados por diversas causas. Nuestro deseo es que se retome la idea. Creo que no pondrán en dudas nuestra aptitud para hacerla realidad».
Fuente: http://www.granma.cu/cuba/2017-02-21/travesia-por-el-cerebro-21-02-2017-23-02-26